A.’.L.’.G.’.D.’.G.’.A.’.D.’.U.’.
S.’.F.’.U.’.


A mi Madre Log .’. Sócrates 2-42
Trab.’. de Alb .’. Presentado por el
M .’.M .’.Jorge Planter Soto.
Titulado “Siempre Vigilantes”


Son los dos primeros oficiales , que siguen en orden jerárquico al Venerable Maestro , y que les toca representarlo en el trono de la veneratura ,cuando él se ausenta por diferentes motivos.
Este importante cargo es antiquísimo, pues ya existía en los misterios de la antigüedad, si bien, con distintos nombres.
Cuando los compañeros constructores alemanes se emanciparon de la tutela de los monjes de los que dependían, y se establecieron con total independencia para trabajar por cuenta propia , acordaron que cada agrupación de las distintas que formaron ,se reunieran una vez mensualmente para tratar asuntos generales del gremio y de interés común.

Estas reuniones eran presididas por el Compañero Director ó Venerable Maestro del taller, quienes les ayudaban en ésta tarea eran dos Contramaestros, escogidos por ser hábiles é inteligentes y teniendo el cargo de vigilar a los obreros congregados, velando por el orden y compostura a fin de que nada viniera a interrumpir la buena marcha de las sesiones, dándoles por éste motivo el nombre de VIGILANTES.

Ahora , de éstos dos vigilantes, el más hábil ó de mayor edad era llamado Primer Vigilante y tenía a cargo la inspección y vigilancia de los compañeros; y el otro llamado Segundo Vigilante, cuidaba de los aprendices.

Cuando debían de celebrarse éstas reuniones, se escogía un sitio despejado y alto desde el cual se pudiera dominar y observar fácilmente los alrededores, y por medio de jalones se marcaba un emplazamiento en forma de cuadrilongo,y orientado de Oriente a Occidente, cerrando su perímetro por medio de una cuerda sujeta a dichos jalones ó estacas, dejando solamente una estrecha abertura, situada al Occidente, para dar paso al interior.

Esta entrada, se distinguía por el tamaño de los dos jalones que la formaban, que eran mucho mayores que los demás que servían para determinar el cuadrilongo y sostener la cuerda que cerraba el recinto.

En aquél sitio se colocaban los dos Vigilantes, uno junto a cada jalón, al fin de examinar y reconocer a los obreros a medida que se presentaban, para cerciorarse que efectivamente tenían derecho a penetrar en aquel recinto,inviolable para todo aquel que no perteneciese a la confraternidad, en calidad de aprendiz, compañero ó maestro, a medida que iban entrando, los compañeros se colocaban del lado que ocupaba el Primer Vigilante, que era el del sur; y los aprendices se sentaban al lado opuesto,o sea al norte, formando así dos alas ó columnas llamadas del norte y del sur, a cuyo extremo ó frente venían a quedar los dos vigilantes como jefes superiores de cada una de ellas.

El Primer Vigilante, usaba como distintivo de su cargo el nivel de albañil,y el Segundo Vigilante, una plomada; instrumentos matemáticos, que juntos con la escuadra, que distinguía al Venerable Maestro, constituían los útiles necesarios y de todo punto indispensables para la ejecución sólida y estable de toda clase de obra de tierra y de fábrica.

Ahora, y me refiero a mis Hermanos Aprendices, fuera un error imperdonable, si alguien pudiera imaginarse que los Vigilantes no son más que autómatas encargados de servir de eco a las palabras del Venerable, repitiéndolas monótonamente cada uno a su turno como se dice que se haga en el ritual, entonces pudiéramos pensar que no se necesita de dotes para poder desempeñar el papel de Vigilante.....¿verdad?

No es así queridos hermanos, los Vigilantes tienen ciertamente una misión más difícil y delicada que desempeñar, son jefes y maestros de los obreros de sus columnas,a ellos les corresponde guiarlos y orientarlos en sus primeros pasos de sus vidas masónicas, enseñarles las máximas, explicarles los símbolos y familiarizarlos con las prácticas y ceremonias de la Masonería. Ellos son los que corrigen sus hábitos y reprenden sus faltas, también son los preceptores,los segundos padres de los obreros puestos a sus cuidados.
Entonces pues, recuerden lo importante que son los hermanos Vigilantes,y no tengan duda de acercarse a ellos, porqué de ellos podemos aprender las sublimes instrucciones de la educación masónica y les garantizo que siempre tendrán el tiempo y la atención para escucharlos y encaminarlos por los senderos correctos de todo lo que nos enseña nuestra Augusta Institución.

Para terminar citaré una máxima del código masón :
Lee y aprovecha, ve e imita ,reflexiona y trabaja,y que todo redunde en beneficio de tus hermanos para tu propia utilidad.

Esperando que el G.’.A.’.D.’.U.’., more en vuestros corazones, me despido de vosotros .

Fraternalmente :

M.’.M.’.Jorge Planter Soto


Mazatlán, Sinaloa 00 de abril del 2001 E.’.V .’.

Trabajo #18